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De la selva su catarata... Y desde Guayaquil la inspiración!


Hola! 

Desde hace mucho que no escribía algo, y no es x que no me hayan pasado cosas que quiera compartir, al contrario todo este tiempo estuvo lleno de historias que poco a poco se las iré contando. 
No puedo negar que las ganas de escribir este post se las debo a una persona muy especial,  a la gordis Patty, que desde Guayaquil me envió un pequeño mensaje que a pesar de la simpleza basto para darme cuenta que los verdaderos amigos están ahí siempre cerca a pesar de la distancia que nos separe..., así que esta historia se la dedico a ella, ojalá te guste mi  gordis!

Bueno como bien saben ya hace un tiempo que estoy en Perú, después de remodelaciones en casa, mucha comida, y salidas con pocos pero grandes amigos decidí explorar un lado de perulandia que no conocía, la selva alta,  así que tome a mis papas y nos subimos aun avión con rumbo a Tarapoto, la ciudad de las palmeras, después de 50 min de vuelo llegamos a este lugar que nos recibió  con una noche estrellada, y ese olor característico de mezcla de humedad y vegetación de la selva, hacia mucho tiempo que no estaba en una ciudad de la selva si mal no recuerd la ultima vez fue en el 2006 cuando viaje con Erick a Iquitos. 

Pero bueno, Tarapoto nos recibió con los brazos abiertos y  porque no decirlo con  mosquitos hambrientos ....  Buena comida, naturaleza, cielo azul, calor y gente sumamente amable fueron el plus.

Al día siguiente recorriendo la ciudad, la cual es súper pequeña, como un pequeño pueblo atrapado en el pasado,  pero a pesar de eso la alegría de la gente se puede percibir a la distancia.
Era hora de salir de la ciudad y conocer un poco mas en los pocos días que estuvimos,  así que nos enrumbamos a la ciudad de Lamas, o también llamada la ciudad de los 3 pisos, esto debido a que su población vive en diferentes niveles de la montaña donde se afinco el pueblo, Lamas es un poblado que es casi nuevo en lo referente a arquitectura  esto a causa que fue destruida casi en su totalidad  por un terremoto un tiempo atrás, la plaza principal luce limpia, y ordenada, no falta el vendedor de cocos, o la señora que vende aguajes en la esquina ( el aguaje es una fruta de una palmera  muy popular en  toda la selva)

Luego fuimos a ver a los pobladores originales de la ciudad, las mujeres vistiendo faldas negras,  blusas blancas y muchas cintas de colores en el cabello lo hacen muy colorido... La verdad la pasamos bien.


Al dia sgte con un calor agobiante buscamos un poco de  frescura  por lo que nos fuimos en busca de las cataratas de ahushiyacu, había escuchado mucho de estas cataratas, no se si yo esperaba algo mas imponente o simplemente no tenia la mente abierta para ver  una caída de agua pequeña pero hermosa, a decir verdad y  le pese a mucha gente no me impresiono.  el esfuerzo físico para llegar es arduo x que la caminata  comprende escaleras, y también zonas  llenas de barro  debido a la lluvia…no puedo negar que  las cataratas son un lugar simpático, te conectas con la naturaleza pero para mi no tuvo nada mas de espectacular fue solo una caída de agua, ojo que esto es solo una opinión personal,  y se les dejo a uds la tarea de  visitar Tarapoto  y sacar sus propias conclusiones.

















Los días en Tarapoto transcurriendo en medio del calor, la algarabia de la gente, mototaxis y ruido  en las calles,  creo que ir a la selva peruana es como  encontrarse con una realidad del país que todos  queremos ocultar,  acostumbrados  a las comodidades que podemos tener en la capital, llegar a la provincia, sobretodo en la selva es como llegar a un país distinto, es descubrir que ese boom económico del que se habla en Peru es algo que no llega a todos los rincones   


Nos vemos Pronto!